Calidad de software
Una nueva aplicación puede suponer un gran desafío si los procesos no se han optimizado suficientemente y el resultado carece de los elementos imprescindibles para garantizar una calidad básicamente alta. Con nosotros, no correrá ningún riesgo en este aspecto. Cada nueva aplicación creada por nuestra empresa es ensayada concienzudamente hasta en sus más mínimos detalles y solo se pone en servicio cuando usted está satisfecho y nosotros convencidos de que seguirá estándolo.
Porque el mundo debe ver la mejor cara de su empresa y de la presencia que esta tiene en Internet, independientemente de la forma que adopte. Una aplicación deficiente que hace fallar un aspecto crítico del servicio o que contiene defectos de partida o errores informáticos puede ocasionar daños enormes, y nosotros somos siempre muy conscientes de la responsabilidad que ello implica, tanto en lo que respecta al desarrollo como a la gerencia de proyectos.
Por eso, en DewertOkin nos guiamos por el siguiente principio: la calidad de un software depende de la necesaria gestión de calidad (QA) y, a su vez, la calidad de esta QA depende de la calidad y precisión de los procedimientos de verificación aplicados.
La base de nuestro proceso consiste probar el uso de software para observar cómo funciona: en coordinación con usted, llevamos a cabo simulaciones de todos los aspectos del mismo. Solamente combinando procedimientos globales que pongan a prueba su aplicación en conjunto y ensayos modulares que iluminen en profundidad aspectos concretos podemos cumplir nuestras estrictas exigencias de calidad. Eso nos permite detectar a tiempo los posibles puntos débiles y realizar los ajustes necesarios. En este sentido, otro aspecto especialmente importante es la realización de una prueba que englobe varias plataformas y le garantice la posibilidad de trabajar de forma segura y sin interrupciones.
También para ello aplicamos el siguiente principio: recopilamos informes y datos relevantes, y los pasos de análisis necesarios nos permiten no solo detectar y subsanar con rapidez errores en su aplicación, sino también actuar velozmente para garantizar la futura seguridad de la misma.
